Mary Douglas Nicol, hizo grandes descubrimientos antropológicos

Mary Douglas Nicol

[1913-1996, Inglaterra]

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 Aquellas que estéis interesadas en la arqueología, antropología y paleontología, seguramente ya sepáis quién es. Pero quizá os suene aún más si os digo que su nombre de casada era Mary Leakey.
Su labor en distintos puntos del planeta, en muchas ocasiones al lado de su marido y también arqueólogo Louis Leakey, proporcionó grandes hallazgos para el mundo de la investigación de los orígenes del hombre.

Mary fue una muchacha rebelde que se interesó por la arqueología de casualidad. Fue su talento como dibujante y su pasión por descubrir el pasado lo que la llevó a convertirse en una de las investigadoras más importantes de este campo.
Su madre era una mujer estricta que intentó siempre frenar el espíritu aventurero que Mary había heredado de su padre, un pintor especializado en paisajes realizados con acuarelas.

A los 12 años nacía su interés por la prehistoria. Lamentablemente, un año después su padre fallecía y su madre la obligó a estudiar en un convento católico del que intentó escapar en repetidas ocasiones.

Pasaron los años y su interés por conocer la historia del hombre prehistórico la hizo apostar por la universidad para continuar con sus estudios, pero no pudo, lo cual la llevó a buscar otros modos de vivir su pasión, consiguiendo participar en distintas excavaciones por su talento en la ilustración. Gracias a la doctora Gertrude Caton-Thompson, que les presentó, pudieron conocerse y trabajar juntos, Louis como arqueólogo titulado y ella, como ilustradora, que inmortalizaba los descubrimientos de los yacimientos. La relación entre Louis y Mary traspasó los límites profesionales, a pesar de que Louis estaba casado. Tras el divorcio de este, se casaron y tuvieron tres hijos.

Juntos, realizaron importantísimos descubrimientos e hicieron modificar algunas teorías acerca de la evolución del hombre, que ella ilustró con gran emoción.

Mary relevó a su marido en la dirección de las excavaciones de la garganta de Olduvai en 1961. En esa zona recóndita de Tanzania, la pareja descubrió un fósil de homínido con una antigüedad de unos dos millones de años y que sería bautizado como Australopitecus. Este no fue su único hallazgo pues durante los años que duraron los trabajos de excavación en Olduvai recopilaron un gran número de herramientas, fósiles y cráneos de distintos períodos de la prehistoria que fueron ordenados y clasificados con gran detalle.

Incluso en su retiro de Nairobi, donde vivió los últimos veinte años de su vida, Mary Leakey no dejó su gran pasión a la que dedicó artículos que recordaban todos sus importantes hallazgos.

Os recomiendo que investiguéis, pues sus ilustraciones y hallazgos son realmente apasionantes.

Mary falleció el 9 de diciembre de 1996. A los ochenta y tres años.

Que su nombre no se borre de la Historia

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